Cuando lo que se busca es aislarse de la rutina y el estrés, Howard Johnson Luján ofrece todo lo que se necesita: cercanía con Buenos Aires, confort, entretenimiento, buena gastronomía, relax, y mucho más.
A sólo 45 minutos de distancia del centro porteño, a 20 cuadras de la Basílica de Luján y a cinco cuadras del Acceso Oeste, se encuentra este lujoso hotel, ideal para familias que buscan realizar una “escapada” de fin de semana.
“En Argentina la fuerza de la marca es muy importante, por su crecimiento constante. A pesar de que el hotel tiene sólo tres años, invertirmos en las instalaciones constantemente. Por eso estamos categorizados como Plaza Resort, ya que cumplimos con los mayores estándares de servicio. Así, fuimos mencionados como el mejor hotel de la cadena en la última nominación”, expuso Esteban Giganti, director comercial del hotel en diálogo con Revista Huéspedes.
Allí, esperan amplias y cómodas habitaciones (algunas también equipadas para personas con capacidades motrices reducidas), mil metros cuadrados de spa: con sauna seco, sauna húmedo, sesiones de masajes, distintos tratamiento wellnes, ducha escocesa, bar, gimnasio y cuatro piscinas de diferentes temperaturas, tanto interiores como externas.
Para aquellos días soleados, el hotel cuenta con una piscina olímpica, rodeado de reposeras y sombrillas para descansar mientras los chicos se divierten en el tobogán acuático que los lanzará a su mejor chapuzón. Y, para mayor comodidad y privacidad, hay un área de gazebos privados equipados con Tv, Directv, ventiladores de techo, Frigobar con bebidas y livings para 6 personas.
Sin oportunidad para aburrirse, para aquellos inquietos que prefieran divertirse en movimiento, también contarán con canchas de tenis y campos de golf. Incluso, este año fueron inauguradas una cancha de fútbol y servicio de driving de golf.
Más aún, el entretenimiento es para cada uno de los integrantes de la familia, ya que todos los sábados por la tarde, un puñado de huéspedes disfruta de clases de AquaGym. Mas los más chicos tienen su propio cuarto de entretenimiento con televisión y diferentes juegos, además de ping-pong y metegol para toda la familia.
“Para los más pequeños, además de la Sala Kids, brindamos actividades con “Seños y Profes” todos los fines de semana. El clima definirá si sus actividades se realizarán dentro de las 20 hectáreas del predio o bien dentro de un amplio salón climatizado. Podrán disfrutar de la piscina climatizada in/out, plaza de juegos, laberinto vivo y en verano la vedette es el tobogán acuático. Y, por la noche se exhiben “pelis con pochoclos” para finalizar un día a pleno con sus pares”, comentó el director comercial.
Una vez llegada la noche, las luces no se apagan. El restaurante del hotel, Magnolia, ofrece exquisitas propuestas gastronómicas y, todos los sábados por la noche, los comensales disfrutan de un show musical.
“Este año traje al hotel a Don Pedro Castro Rojas, un chef chileno que ha trabajado conmigo en otros emprendimientos, quien hace de su cocina su hogar, donde sus platos no sólo contienen componentes de calidad sino que los mismos siempre son muy sabrosos. Juega con los colores y aromas, haciendo de un plato que suena muy elaborado algo simplemente gustoso”, contó Giganti.
Pero, cabe destacar que el hotel cuenta con cuatro salones para eventos corporativos, y otro salón de 400 metros cuadrados para eventos sociales.
También este hotel aloja grupos deportivos en pre temporadas, ya que posee también una cancha de fútbol profesional.
Así, para concluir, Esteban Giganti enunció: “Nos esforzamos a diario para sorprender gratamente a los turistas que nos visitan. Con la visión enfocada al servicio y con la atención de la devolución que nos hacen nuestros huéspedes para su mejora continua. Disfrutamos de la industria del turismo, confiamos en ella y este año ampliamos su geografía, ya que estamos gerenciando un Hotel Boutique en Fort Lauderdale en la Florida, destino muy elegido por el turismo nacional”.