Decidieron convertir la histórica residencia familiar en una exclusiva residencia de lujo para acoger a los viajeros más sofisticados y exigentes. 
Cada jueves por la tarde a los salones de la villa asistían personajes destacados de la época como Romualdo Bonfaldini, Sidney Sonnino y Rabrindanath Tagore, premio Nobel de literatura en 1913. 
El respeto por el territorio y la atención al equilibrio ambiental fueron las líneas que guiaron la construcción. 
Galleria IUna villa patricia de inicios del siglo XX, con vistas a un encantador jardín a la italiana, alberga los espacios de Villa Spalletti Trivelli, una de las soluciones de acogida más originales y exclusivas entre las propuestas de Roma. piano
Gabriella Rasponi, viuda del conde Venceslao Spalletti Trivelli (quien fue senador del Reino) sobrina de Gioacchino Murat y de Carolina Bonaparte (hermana de Napoleón) adquirió el terreno situado en frente de los jardines del Quirinal donde estaba situada la casa de Tito Pomponio Attico, editor y amigo de Cicerón y le encargó al arquitecto Domenico Avenali (asistido por valiosos artistas y artesanos como Edoardo Gioja) la construcción de Villa Spalletti Trivelli.
Gracias a la inteligente sensibilidad de la condesa Rasponi, presidenta del Consejo nacional de mujeres italianas, Villa Spalletti Trivelli se convirtió en un cenáculo político y cultural de prestigio. Cada jueves por la tarde a los salones de la villa asistían personajes destacados de la época como Romualdo Bonfaldini, Sidney Sonnino y Rabrindanath Tagore, premio Nobel de literatura en 1913.
A principios de los años 1930, Cesare Spalletti Trivelli heredó de su madre la residencia histórica ubicada en el centro de Roma, donde vivió con su mujer, la condesa Guendalina Cavazzi della Somaglia. Nombrados Caballero y Dama de corte de la Reina María José de Bélgica, mujer de Umberto II de Saboya (último rey de Italia) el conde y la condesa dejaron la Villa en manos de su hijo Piero, sensible escritor y delicado poeta.
En 2004 Giangiacomo Spalletti Trivelli, hijo del conde Piero, y su mujer Susanna, hija del campeón de equitación Raimondo d’Inzeo, decidieron convertir la histórica residencia familiar en una exclusiva residencia de lujo para acoger a los viajeros más sofisticados y exigentes.
Historias de película
Una villa patricia de inicios del siglo XX, con vistas a un encantador jardín a la italiana, alberga los espacios de Villa Spalletti Trivelli, una de las soluciones de acogida más originales y exclusivas entre los hoteles boutique, las villas y los hoteles de lujo en Roma. Los huéspedes, rodeados de decoración antigua procedente de la colección privada de la familia Spalletti Trivelli, disfrutan la experiencia de un lujo atemporal inmersos en la relajante atmósfera de una antigua casa nobiliaria, sin por ello renunciar al más moderno confort.
Pero no todo termina aquí… también está la bodega: Pomario: The Family’s Olive Oil And Wines. La propiedad se encuentra en la provincia de Perugia en el municipio de Piegaro cerca de Monteleone de Orvieto, en la zona de demarcación entre Toscana y dos importantes áreas de Umbria: la de las colinas de Orvieto y las de Trasimeno.
Pomario se convirtió en parte de la experiencia de la villa en un día lleno de niebla de otoño en octubre de 2004. Aunque la familia tenía una vaga idea de una posibilidad en Umbría, no contaban con indicación precisa de lugar y tipo. Habían visitado varias hermosas propiedades ubicadas entre Orvieto y Todi, pero les parecían lejanas lejos de su concepto de viñedo de Umbría. Entonces le preguntaron al agente de bienes raíces si conocía algunas ruinas que serían interesadas de ser restauradas. Después de una breve reflexión dijo que había una propiedad en venta en Monteleone di Orvieto: una ruina con 50 hectáreas y cerca de 40 de bosque.
Al salir de la carretera en Fabro, se sube por la ladera que conduce a Monteleone y desde allí, en menos de 5 minutos, se llegaba a un camino de tierra. A través del bosque, apareció un viejo viñedo, algunos olivos y finalmente la casa envuelta en niebla. El paisaje a su alrededor era invisible, pero un silencio casi irreal fue testigo de un aislamiento en sintonía con el deseo de serenidad que se estaba buscando.
Ya durante la restauración de la casa comenzaron a cuidar los olivos y el viñedo. Los olivos, abandonados durante varios años, resultaron, con una poda intensa, vueltos a la vida productiva. posteriormente, con la colaboración de Federica De Santis, agrónoma, y Mery Ferrara, enóloga, reestructuraron el viejo viñedo con sus antiguas variedades de Sangiovese, Trebbiano y Malvasia. Clonaron las mejores vides para crear esquejes enraizados con lo que enfrentar los inevitables y numerosos fracasos del viejo viñedo y al mismo tiempo, con las mismas variedades, se plantó un nuevo viñedo de poco menos de dos hectáreas. Finalmente, en 2010, se recuperó otra tierra cultivable de unos 8.000 metros cuadrados, donde nació un pequeño viñedo aterrazado, con variedades Riesling y Sauvignon Blanc, para la producción de un Muffato. Se construyeron otras 4 hectáreas de viñedo en enero de 2016.
Con V de vino y villa
Pomario es una pequeña colina muy brillante y aislada del resto del territorio por un denso bosque que la rodea. Se encuentra en Umbría, en el límite con la Toscana, entre Città della Pieve y Orvieto, a 500 m de altura.
El suelo rico, pero con una estructura suelta de arcilla limosa, iluminación continua y presencia de fuentes de agua, son los elementos fundamentales que han hecho de Pomario un lugar de elección de asentamientos agrícolas desde la antigüedad.
De los viñedos de Pomario proceden dos vinos ecológicos, un tinto, el Sariano, premiado con una medalla de plata en los Decanter World Wine Awards 2014 y un blanco, el Arale. A estos habrá que añadir pronto también un rosado y un vino dulce intenso de podredumbre noble. Ambos vinos han obtenido dos copas en la puntuación de la Guía del Gambero Rosso. El olivar de Pomario produce un aceite de oliva virgen extra ecológico, al cual, en 2014, la Guía del Gambero Rosso le concedió el prestigioso reconocimiento de las tres hojas.
El respeto por el territorio y la atención al equilibrio ambiental fueron las líneas que guiaron la construcción de la nueva bodega Pomario. Nacida de la renovación del antiguo cobertizo de herramientas, ha sido concebida con modernidad, conservando el estilo de la granja y reutilizando los materiales originales. Los diferentes entornos de procesamiento están equipados con sistemas ecológicos actualizados para el control de los parámetros esenciales para la producción de vinos de excelencia.
