Muchas veces se escucha hablar del cóndor como el ave voladora más grande del mundo, y aunque amamos al cóndor, no es así. Las aves voladoras más grandes del mundo son las avutardas asiáticas (por su tamaño y peso), pero tampoco son ellas las que reinan.
Si tomamos en cuenta el diseño y la envergadura (el largo) de sus alas los que verdaderamente reinan en nuestro mundo son los poco conocidos albatros.
Recordemos además que tres cuartos de nuestro planeta está cubiertos por mares, sus dominios. Con envergaduras de hasta 3,5 metros, estos reyes del mar vuelan errantes por el océano, donde permanecen toda su vida. Descansan, comen y viven su vida oceánica. Los especialistas llaman «pelágicas» a este tipo de vida. Cada 2 o 3 años los albatros llegan a una isla solitaria y desértica en algún sitio del océano que ellos conocen y allí se reproducen. Allí es donde nacen, entre rocas y libres de depredadores. Son torpes en la vida en tierra a la que apenas conocen y no están acostumbrados.
En la foto el más común de los albatros: el «albatros de ceja negra», uno de los primeros que solemos ver cuando subimos a un barco y nos internamos mar adentro.
La naturaleza de Sudamérica es una de las más prístinas del mundo. Aquello que impactó a Darwin en su tiempo, sigue vivo en diversos sitios fabulosos. Buenos Días Birding forma nuevos observadores con cursos prácticos en Buenos Aires y organiza viajes por Argentina, Chile, Perú y Brasil.