La bodega mendocina lanzó Ratafia Chardonnay, una innovadora propuesta, inspirada en una tradicional bebida, que llevó varios años de investigación y ensayos.
La ratafía, como suele denominarse en Cataluña (lugar donde obtuvo denominación de origen) es un licor tradicional de esas tierras, con más de mil años de antigüedad.
En el caso de esta etiqueta, fue elaborada por Bodega Cruzat a partir del aguardiente obtenido de la destilación de los mejores vinos bases, previamente macerados con diferentes frutos y endulzado con mosto fresco de uva.
Aquí el vino base fue macerado con cáscaras de naranja y lima, y luego destilado en alambiques (un instrumento que se usa justamente para separar líquidos) de cobre.
Ideal para disfrutar como aperitivo o para el final de las comidas. Entre los múltiples usos, se lo puede beber como digestivo y para calmar el frío. También suele usarse de base para la elaboración de cócteles. En cuanto al maridaje, ensambla muy bien con patés, postres de chocolate, helados y quesos.
